domingo, 6 de junio de 2010

Pensamientos de madrugada.

La votación que se produjo esta semana en el Parlamento aprobando unas medidas drásticas, para intentar paliar la profunda crisis en la que nos están metiendo, son medidas única y exclusivamente políticas, no son medidas pensadas y meditadas para superar una crisis. ¿Por qué Zapatero las dispara? Porque se las imponen desde la Unión Europea, pero aún así desde Europa se ven insuficientes. ¿Qué pasaría si no se aprueban esas medidas? Pues dos cosas, la primera y más rápida acabar como Grecia, la segunda y más lenta la convocatoria de elecciones anticipadas.

Pero en este caso la crítica también la tengo que hacer hacia Mariano Rajoy, que se quedó muy pasivo ante Zapatero, en mi opinión el Señor Rajoy tenía que haber recriminado al Señor Zapatero que el único culpable de esta situación y de tener que asumir estas medidas es él y sólo él, y además solicitar a todos los grupos representados en el Parlamento que se dejasen de abstenerse y de tonterías, porque al final es lo mismo, y pongamos encima de la mesa una moción de censura, sin más rodeos y echemos a este señor del Gobierno.

Que conste que creo que ésta posibilidad de realizar una moción de censura, se ha intentado pero por la puerta trasera del Parlamento, intentando que no se votara un decreto para que cayese el Gobierno de una manera fulminante, yo si creo que hay que llevar a cabo esa moción de censura, dando la cara, diciendo las cosas claras, ¿este decreto de qué trata? Del déficit. ¿El déficit es el problema de España? No, el déficit es un problema, es un presupuesto, ¿cuál es, entonces, el problema?, muy simple y sencillo, una economía endeudada hasta la médula, que no generamos ni ganamos suficiente dinero y que no se tiene confianza ni en el Gobierno, ni en el Banco de España.

¿Cuál es la solución a estos tres problemas? Lo primero poner al frente de nuestro país un nuevo Gobierno, que de confianza y seguridad a los mercados, porque el que tenemos ahora sólo crea desconfianza e inseguridad. Para las otras dos hacen falta empresarios que inviertan, pero para que inviertan se necesitan dos cosas, que se restituya el crédito y la financiación, acompañado de un cambio en el sistema laboral. Por otro lado hay que aclarar la situación de las cajas de ahorros y reformar el sistema financiero, por último y no por ello menos importante, realizar un cambio estructural de la administración pública, para eliminar gastos innecesarios, que nos hacen ineficientes y que no podemos pagar.

Y ahora voy a contestar a todos aquellos que afirman que la oposición debería apoyar al Gobierno en estos momentos de crisis tan grave, es decir, salvarle el culo al Señor Zapatero. Lo primero decir que hay que ser valientes, si realmente no estás de acuerdo ni con Zapatero ni con sus medidas, vota no, abstenerse es de cobardes, porque al final le salvas el culo. La oposición la única obligación que tiene es la de ganar el poder, quitar del Gobierno a quien está haciéndolo mal, el único problema que tiene, en este caso el partido más votado de la oposición, es no saber trasmitir, o vender, al resto de los partidos de la oposición con los argumentos apropiados, y vuelvo a lo de antes, para realizar la tan traída moción de censura o convocar elecciones anticipadas.

En definitiva, que Dios, si existe, nos coja confesados, porque cada día que pasa nos parecemos un poco más a Grecia.