Un año de cirugía bariátrica

El próximo miércoles día 15 de diciembre se cumplirán 365 días de mi operación de cirugía bariátrica: reducción de estómago y bypass en el intestino. Cumplido este año lo primero que quiero es agradecer al departamento de endocrinología del Hospital Provincial de Santiago, muy especialmente al Doctor Peinó, y al departamento de cirugía, también especialmente al Doctor Iván Baamonde, reitero, quiero agraceder enormemente su labor, han conseguido que sea más feliz que hace un año e incluso diría que más alegre y satisfecho.

Hemos conseguido reducir mi tamaño a la mitad de lo que era hace un año, he perdido 62 kilos, he estabilizado mi peso en 72 kilos, pudiendo comer de todo, carnes, pescados, patatas, verduras, frutas, pastas, arroces, incluso me he permitido el lujo de comer pizza, y como diría alguién "en estas fechas tan entrañables" me estoy permitiendo el lujazo de comer, poco, pero comer turrón o polvorenes.

Han transcurrido doce meses sin apenas molestias, más allá de un ataque de gota, que no se ha vuelto a reproducir, o unos leves vómitos al principio. A día de hoy no tengo que tomar ninguna medicación a no ser una pastilla para el ácido fólico que lo tengo un poco bajo en las analíticas, estas últimas están perfectas, en los niveles correctos.

Además, para completar mi felicidad, estoy conociendo a una chica muy inteligente y muy guapa, por que no decirlo jajaja, todavía nos estamos conociendo pero creo que llegaremos lejos.

En definitiva, mi experiencia ha sido muy positiva, pero siempre os recomendaré que os mentalicéis y que sepáis que os enfrentáis a una operación complicada, que no es una intervención sin riesgos, los tiene y muchos, pero supongo que echándole cabeza y valor todo sale adelante.

Secuestrados por nuestro Gobierno

Secuestrados así nos sentimos los españoles desde ayer por la tarde, sobre todo los que tienen que viajar en este puente, para visitar a sus familias, para ir a la boda de un familiar, al entierro de ser querido, o tan sólo para descansar, que nos lo tenemos merecido. Pero el resto de españoles junto con estos nos sentimos abochornados y avergonzados, por el lamentable espectáculo que se está dando al mundo entero, llegando a cerrar un espacio aéreo utilizado por muchos países europeos para comunicarse con América o con África.

¿Qué se creía el Ministro de Fomento, Pepiño Blanco? ¿Dónde está ese ejército tan preparado que podría manejar el cielo español? ¿Por qué no viajó el Señor Zapatero a la cumbre iberoamericana? Pepiño Blanco es usted un chulo, un prepotente y un déspota, lo que está sucediendo con los controladores es culpa suya, pero no en exclusiva, su Presidente ayer le echó una mano. Esta situación se veía venir y no quiero dejar sin culpa a los controladores, que la tienen, porque esto no se hace así, se avisa con tiempo suficiente y se convoca la huelga por los cauces legales.

Pero vamos al plato más fuerte, se nos dice estos días que el Señor Zapatero no viaja a la cumbre iberoamericana porque existen cosas muy importantes en España que le impiden viajar a Argentina, dónde tiene que estar porque es su obligación como representante del país que tiene grandes intereses económicos en Latinoamérica. Pues señores el resultado parece ser una mentira más, parece ser que ya se olían el problemilla que iba a surgir con los controladores. Me explico.

Ayer durante el Consejo de Ministros se aprueba un decreto ley por el cual todos los controladores que soliciten una baja laboral, tendrán que recuperar esas horas, por si no se entendió, un controlador tiene que trabajar al año alrededor de 1680 horas, como cualquier trabajador tiene derecho a pedir bajas laborales, pero en este caso si un controlador, por ser paritarios pongamos una embarazada que acaba de ser mamá, tiene derecho a tres meses de baja por maternidad, unas 450 horas que ha dejado de trabajar ya que tiene derecho a esa baja, pues según este real decreto tiene la obligación a recuperarlas. Lo nunca visto en el sistema laboral español.

Vale, vale, me vais a llamar extremista, pues pongamos otra enfermedad cualquiera, pongan ustedes el ejemplo, supongamos que esa persona se va de baja médica cuarenta horas, ¿pocas verdad?, sobre todo a lo que estamos acostumbrados a ver en bajas, pues dentro del año laboral tiene que recuperarlas, es decir los controladores no tienen derecho a bajas laborales, pero a dónde hemos llegado.

Menuda patada que le acaban de pegar los socialistas al ideario político de su partido, a los derechos fundamentales de cualquier trabajador, a los convenios laborales, vamos que se lo han pasado todo por el forro. Pero lo peor no es eso, sino que el Gobierno sabía que esto podía pasar, por eso se queda el Señor Zapatero en España, a lo que se suma el despropósito de tardar desde las tres de la tarde de ayer a las nueve de la mañana de hoy sábado en convocar un gabinete de crisis, pero todavía podemos tocar más la moral del contribuyente, existe una forma de obligar a los controladores a trabajar, que se trata de convocar el estado de alarma, siendo obligación de los controladores de realizar sus labores y aquel que no cumpla se le impondrá una pena de hasta ocho años de prisión.

¿Quién tiene más culpa, el Gobierno o los controladores? ¿Quién ha dejado nuevamente de ejercer su labor de gestionar España?