Un año sin escribir.

Muy buenas, una año sin escribir, ¿cómo o cuánto cambia la vida en un año? La verdad es que a mi poco. Mi vida sentimental mejora, pues mi mujercita y yo vivimos juntos, compartiéndolo todo, su hija a puntito de convivir definitivamente en nuestra casa, como es lógico, pues el nuevo curso escolar está a un mes de comenzar.

Por otro lado mi operación de cirugía bariátrica ha funcionado a la perfección, hace un año y medio que estabilicé mi peso en 78-79 kg y me mantengo, a pesar de algún que otro exceso, todas las analíticas están perfectas, vamos que como un roble.

En cuanto al trabajo o la parte económica, supongo que igual que jodidos que el resto de España, claro está que comparándome con aquellos que aún conservan su puesto de trabajo, es evidente que peor que yo están los millones de parados de este país.

¿Millones de parados? Creo que es decir mucho ¿no? Las grandes superficies siguen vendiendo, sigo viendo mucha gente comprando, es cierto que menos, pero aún son muchos, las agencias de viajes siguen vendiendo paquetes turísticos y cruceros. Alguien se ha parado a pensar que pasaría realmente si la cifra de parados sumada a los adolescentes, niños y jubilados, que evidentemente no trabajan, fuese tan real ¿quién trabaja y para quién?

Según la encuesta de población activa publicada por el INE en el mes de febrero el año 2011 termina con 17.807.500 trabajadores activos, es decir, que supuestamente 17 millones trabajan para que vivan unos 46 millones de españoles, a mi no me dan las cuentas. Creo que no hay tanto inspector para vigilar tal cantidad de economía sumergida que hay en estos momentos en nuestro país.

Si todos, y digo todos, fuesemos legales y pagásemos todas nuestras obligaciones tributarias, creo que no estaríamos tan mal como estamos, sólo hay que ver lo que logran otros países con otra mentalidad más contribuyente hacia sus vecinos.

Creo que para mi vuelta ya he dicho bastante, jejejejeje.